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"Adicciones necesarias"

La lluvia es la droga de los nostálgicos, quienes a veces la disfrutan y otras veces la sufren; pero no deben asustarse, esto es simplemente una forma de calmar la ansia hasta que el sol brille de nuevo. Porque, aunque no sea lo más conveniente, hay ocasiones en las que la droga solo nos puede matar cuando perdemos el control sobre ella. Estamos expuestos a consumir cosas que nos alteran, pero solo algunos son conscientes de ello y tratan de dominar a su cerebro, pidiéndole que no reclame tanta dopamina en tan poco tiempo.

Todos requerimos de esa “lluvia” para sentirnos nostálgicos, alegres y tristes a la vez; esas vivencias se convierten poco a poco en nuestro recurso para manejar el comportamiento, ese que te dice: “tenés que hacer esto” para luego poder “vivir eso que deseas”...




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“El ser es volátil”

“ Reconocer la falta de comprensión de uno mismo como parte de la esencia de conocerse un poco todos los días de acá hasta el día que seamos eternidad.” No entiendo el deseo humano de intentar conocerse a uno mismo al punto de olvidarse de reinventarse. Parte de crecer es entender que nuestro deseo no solo está ligado a la mera conformidad de ser, sino a comprender que, aunque deseemos ser alguien con todas nuestras fuerzas, primero tendremos que transitar la incomodidad de no ser quienes anhelamos. En ese viaje, podemos encontrarnos con versiones de nosotros mismos que resulten más auténticas que los propios deseos por alcanzar. Tal vez, el deseo de ser no implica descubrirnos finalmente, sino conocernos al principio, todos los días, incluso cuando las dudas nos invaden al punto de sentir que nuestro camino parece desvanecerse a lo lejos. Como si el mismo hecho de encontrarnos a nosotros mismos implicara correr hacia algún otro lado donde no se sienta tan incómodo no saber quiénes som...

“Hasta que la muerte nos separe”

Estuve esperando este día mucho tiempo. Hoy es un momento especial para mí, porque significa que dejé de tener miedo de desaparecer de un mundo tan frío y frívolo como este. No busco la muerte, y mucho menos huyo de ella, pero ya no me asusta la idea de dejar que se enfríe todo lo que dejo atrás si me entrego al infierno. Quién sabe, quizás allá, en donde se encuentra el olvido, hay mucha gente que ya no le teme a estar sola, porque simplemente renacieron como almas nuevas, navegando libremente en lo que antes se consideraba pecado. La realidad es que ya no tengo miedo de dejar arder todo lo que desconozco de mí. Allá en la tierra, todo el mundo cree que vive la vida como si no hubiera un mañana, pero yo creo que viven en el mañana como si no existiera un hoy. Estoy cansada de la gente que le teme al fuego, al calor de estar vivo. Ya no busco mitigar el fuego que esconde mi piel, porque cuando siento algo, lo siento en el alma. Lo siento en el cuerpo, vibrando y quemándome las entrañas...

"Mi luz"

Hay una luz cerca mío que me endulza el oído y me narra sus cuentos más deslumbrantes.  Me cuenta sus pesares y la forma en la que aprendió a vivir con ellos. Me narra sus locuras y se alegra cuando me río de ellas. Me anima a ser responsable y también me deja ser impredecible. Me cuida como nadie y también me deja ser libre. Me quiere con todo su corazón y conoce mi sensibilidad.  Cuando dudo de mí, me invita a soñar que estoy volando para que vea desde arriba todas las huellas que fui dejando en los lugares que pisé. Se esfuerza por mantenerme cuerda y al mismo tiempo acepta que tengo mis momentos. Desde que la conocí es una luz que se fue encendiendo con cada sacrificio y cada grandeza. Es una mujer imponente, generosa y luminosa como la luna, pero lo que la diferencia de ella es que no le hace sombra a nadie a pesar de su inmensidad. Esa luz es mi mentora y la voy a llevar eternamente conmigo. Porque aún titilando a lo lejos al igual que una estrella, sé que no es de las f...